Poniéndonos estrictos no puede haber ningún cultivo sin suelo, si entendemos como suelo a toda superficie sobre la que se pisa.
Entonces para este caso definamos suelo como la tierra donde normalmente se cultiva. Los investigadores en fisiología vegetal descubrieron en el siglo XIX que las plantas absorben los minerales esenciales por medio de iones inorgánicos disueltos en el agua. En condiciones naturales, el suelo actúa como reserva de nutrientes minerales pero el suelo en si no es esencial para que la planta crezca. Cuando los nutrientes minerales de la tierra se disuelven en agua, las raíces de la planta son capaces de absorberlos.
Aunque suele utilizarse cultivo sin tierra como sinónimo de hidroponia, algunos autores refieren que la hidroponia se aplica exclusivamente a los cultivos en agua, pero finalmente en ambos casos la intención es tener un control en la cantidad de nutrientes que se diluyen en el agua para el consumo de la planta
A partir de los años 80s. Las técnicas de cultivo sin suelo CSS son utilizadas a gran escala en los circuitos comerciales de producción de plantas de tabaco, (floating) eliminando así los almácigos en suelo que precisan bromuro de metilo para desinfectar el suelo de malezas, patógenos e insectos. También en Holanda y otros países de alto grado de desarrollo de cultivos intensivos las técnicas de CSS han avanzado, desarrollando industrias conexas y numerosas tecnologías que tienen que ver con el desarrollo de nuevos medios de cultivo como la perlita, la lana de roca, la fibra de coco o cocopeat, la cascarilla de arroz tostada y otros medios apropiados para sostener (solo para sostener) a las plantas del cultivo.
En ambos casos ya sea cultivando en agua como la primera imagen de tomate en NFT o en la segunda (tomate en sustrato) los resultados son excelentes.